Protagonismo chileno en la jornada de cierre de las ligas española e italiana. En el derbi gallego ante el Deportivo, Fabián Orellana sentenció el choque con su gol. Y Mauricio Pinilla hundió un poco más al Inter, anotando desde los once metros el gol que le dio la victoria definitiva (2-1) al Atalanta.
Protagonismo chileno en la jornada de cierre de las ligas española e italiana. En el derbi gallego ante el Deportivo, Fabián Orellana sentenció el choque con su gol, además de asistir en otro e iniciar la jugada del penal a favor del Celta (victoria 4-1). En la Serie A, Mauricio Pinilla hundió un poco más al Inter, anotando desde los once metros el gol que le dio la victoria definitiva (2-1) al Atalanta.
– Orellana se divirtió en el 'O Noso Derbi' –
Hubo que esperar hasta la fecha nueve del campeonato nacional de la liga española para vivir el primer derbi gallego de esta campaña, un duelo histórico entre Celta de Vigo y Deportivo de La Coruña que siempre es garantía de grandes emociones. No quiso faltar a la cita Fabián Orellana, que sumó su segunda titularidad consecutiva en liga después de recuperarse de la lesión que lo ha mantenido apartado de las canchas casi dos meses.
Aunque en algunas ocasiones del transcurso del encuentro cambió de banda, el chileno trabajó la mayoría del tiempo por el extremo derecho, donde recibió la pelota en el minuto 32' para iniciar la jugada del tanto que abrió el marcador. Orellana controló un pase en largo, bajó el esférico al piso, encaró al defensor rival y, cuando se esperaba el centro al área, vio cómo el carrilero Hugo Mayo se incorporaba al ataque, a quien asistió para que marcara el 1-0.
El encuentro llegó al descanso con 1-1 en el marcador, pero al cuarto de hora de regresar de los vestuarios, la balanza se inclinó nuevamente a favor de los locales. El extremo nacido en Santiago de Chile entró nuevamente por el costado derecho y esta vez sí puso el centro al área, para que el volante danés Daniel Wass rematara de cabeza y el defensor brasileño Sidnei Rechel cortara la trayectoria con la mano. Penal a favor del Celta y 2-1.
La guinda a un partido sobresaliente de Fabián Orellana la puso él mismo en el 78, cuando el carrilero izquierdo Jonny Castro sirvió un centro al borde del área pequeña y el chileno se anticipó al defensor español Fernando Navarro para rematar de cabeza a gol. La segunda diana del extremo chileno, en las cuatro fechas que ha disputado en esta liga, desató la fiesta entre los hinchas celtiñas que acudieron a la cancha de Balaídos a disfrutar del 'O Noso Derbi', que finalizó con el 4-1 definitivo, obra del atacante español Iago Aspas.
El '14' del Celta de Vigo reafirmó su recuperación festejando por segundo partido consecutivo, después del gol frente al Ajax de Amsterdam en Europa League (2-2) hace apenas tres días, algo que no logró en toda la pasada campaña, donde sumó siete dianas en 34 fechas de liga.
– Pinilla, protagonista desde el banco –
El Atalanta consiguió su tercera victoria (2-1) en las últimas cuatro fechas a costa de un Inter de Milán que suma tres derrotas consecutivas. La culpa de este nuevo disgusto para el técnico holandés Frank De Boer fue de Mauricio Pinilla, que salió desde el banco para firmar el triunfo de su equipo desde el punto de penal.
Era el minuto 63' de partido, el marcador reflejaba 1-1 y el técnico del Atalanta, Gian Piero Gasperini, eligió como segundo cambio a Mauicio Pinilla, que ingresó en la cancha por el italiano Andrea Petagna.
A dos minutos de llegar al final del tiempo reglamentario, el volante costamarfileño Franck Kessié entró en el área con la pelota controlada y fue objeto de falta por una entrada del defensor italiano Davide Santon. El colegiado señaló el punto de penal y la oportunidad de decantar el partido a favor de los locales.
Mauricio Pinilla pidió el esférico para asumir toda la responsabilidad, tomó carrerilla y colocó su disparo a la derecha del arquero esloveno Samir Handanovic. Gol que dio tres unidades muy valiosas al Atalanta y provocó un festejo desmedido del atacante chileno con su hinchada que le costó la cartulina amarilla.
AFP
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