El estadio Mané Garrincha de Brasilia, que acogerá el juego inaugural de la Copa Confederaciones en junio y siete partidos del Mundial de fútbol de 2014, fue inaugurado oficialmente este sábado por la presidenta brasileña Dilma Rousseff.
Sin público pero acompañada del ministro del Deporte, Aldo Rebelo, el gobernador del Distrito Federal, Agnelo Queiroz, otras autoridades y de obreros que trabajaron en la reforma del estadio, la mandataria dio el puntapié inicial en este gramado que el próximo 15 de junio acogerá el primer partido de la Confederaciones, el juego entre las selecciones de Brasil y Japón.
«Siento mucho orgullo de probar la calidad y modernidad de sus instalaciones y el criterio de hacer construcciones sólidas, más sencillas. Y al mismo tiempo bellas», declaró la mandataria al inaugurar el estadio en una breve ceremonia.
Con una gran explanada y una fachada compuesta por 288 pilares de 36 metros de altura, el diseño del estadio está inspirado en la obra del célebre arquitecto carioca Oscar Niemeyer, ya fallecido, cuyo trazo es la mayor característica de la capital brasileña.
Unos 15.000 trabajadores pasaron por la obra
La reforma del estadio tuvo un costo de 1.015 millones de reales, unos 500 millones de dólares al cambio actual, la más cara de los estadios que acogerán la Confederaciones y el Mundial del 2014.
El estadio nacional Mané Garrincha, con capacidad para 71.000 espectadores, se abrió por primera vez al público la tarde de este sábado, cuando acogió la final del campeonato de fútbol del Distrito Federal entre Brasilia y Brasiliense.
El próximo 25 de mayo, por otra parte, el Mané Garrincha será escenario del arranque del campeonato del Brasileirao entre Flamengo y el Santos.
La Copa Confederaciones reúne a ocho selecciones y se disputará entre el 15 y el 30 de junio en seis de las 12 sedes mundialistas: Belo Horizonte, Brasilia, Fortaleza, Recife, Rio de Janeiro y Salvador.
Las otras sedes que acogerán el Mundial son: Cuiabá, Curitiba, Manaus, Natal, Porto Alegre y Sao Paulo.
Los estadios de Fortaleza, Belo Horizonte y Salvador ya fueron inaugurados. El de Recife quedará inaugurado este lunes y el Maracaná de Rio el próximo 2 de junio con el amistoso Brasil-Inglaterra con lleno total.
«Estos seis estadios demuestran nuestra capacidad, competencia y determinación en construir seis estadios más», celebró la presidenta Rousseff.