Corinthians rompió el miércoles el invicto de Tijuana en la Libertadores con una goleada de 3-0, en el partido celebrado en el Pacaembú de Sao Paulo con el apoyo de su hinchada, luego de que se rebajara la sanción sobre el ‘Timao’ por el trágico partido en Bolivia.
Corinthians rompió el miércoles el invicto de Tijuana en la Libertadores con una goleada de 3-0, en el partido celebrado en el Pacaembú de Sao Paulo con el apoyo de su hinchada, luego de que se rebajara la sanción sobre el ‘Timao’ por el trágico partido en Bolivia.
El internacional Alexander Pato abrió el marcador a los 25 minutos y 10 minutos después, el peruano Paolo Guerrero, puso en la pizarra el 2-0. El volante Paulinho sentenció la goleada a los 81.
Con el resultado, el ‘Timao’ se acerca a los líderes mexicanos (9 puntos) del Grupo 5 con 7 unidades, seguido por Millonarios de Colombia(3) y San José de Bolivia (1), que se enfrentan este jueves.
Los mexicanos vencieron la semana pasada por la mínima diferencia a Corinthians, campeones de la última Libertadores y del Mundial de clubes de Japón.
Tijuana quería conservar su invicto y se cerró atrás apostando en salvar un empate o ganar a punta de contraataques. En los primeros minutos del juego, los corinthianos buscaban con dificultad los espacios para llegar al arco del portero Cririlo Saucedo, aunque amenazando por el lateral derecho.
El primer gol llegó precisamente por la derecha con un remate de Renato Augusto en el área grande y la pelota rebotó tres veces en el marco del arco hasta que Pato llegó rápido a empujarla para anotar.
El delantero, por el que Corinthians pagó 15 millones de euros, anotó el gol justo antes de ser sustituido por Romarinho, tras manifestar dolores.
En el segundo gol, Renato centró para Guerrero un pase de Paulinho a la línea de meta. El disparo del peruano rebotó en el gramado antes de entrar al arco.
En el segundo tiempo, los ‘caninos’ del profesor Antonio Mohamed salieron con un esquema más ofensivo, tratando de revertir el marcador contrario.
Los locales se quejaron del juego agresivo de Tijuana, que terminó con cinco tarjetas amarillas.
Y antes del pitazo final, Paulinho centró a Guerrero que marcó gol, pero fue anulado por estar adelantado.