Zamorano es considerado una de las glorias del fútbol chileno, poseedor de una fuerza y consistencia en el cabezazo, principal virtud para ser un goleador temible en el juego aéreo. Un certero delantero que no necesita presentación y que este miércoles cumple 50 años de edad.
No era casualidad despertar los lunes por las mañanas y encontrar titulares como “Ivan ‘Bam Bam’ Zamorano lo hizo otra vez”, “Zamorano, amo y señor de los goles” o “El chileno rompe redes en Europa”, ese era el goleador trasandino, Ivan Zamorano, un certero delantero que no necesita presentación y que este miércoles cumple 50 años de edad.
Zamorano es considerado una de las glorias vivientes del fútbol chileno, poseedor de una fuerza y consistencia en el cabezazo, principal virtud para ser un goleador temible en el juego aéreo. Ídolo en la selección chilena, ‘Bam Bam’, fue por muchos años máximo anotador histórico con 40 goles, y uno de los artífices para la clasificación al Mundial de Francia 98’ y conseguir, además, la Medalla de Bronce en los JJOO de Sídney 2000, en donde fue el jugador con más conversiones.
El trasandino fue un referente fuera y dentro de la cancha, sus compañeros le decían “El Gran Capitán”, y por muchos años llevó la cinta en ‘la Roja’ y en el Colo Colo de sus amores.
Iván Zamorano nació en 1967 en la comuna de Maipú y su debut futbolístico fue en 1984 en Cobreandino, para luego pasar a Cobresal, donde jugó hasta 1987. Sus buenas campañas lo hicieron saltar al fútbol europeo con sólo 20 años de edad.
En ese tiempo era difícil encontrar un delantero completo con espíritu luchador, apasionado y gran definidor de situaciones límites, a lo largo de su carrera convirtió un total de 350 goles oficiales (incluyendo 27 en la Segunda División Chilena y 6 en selección olímpica trasandina), que lo convierten en el segundo máximo anotador chileno de la historia, tras Osvaldo 'Pata Bendita' Castro (358) y por encima de Carlos Caszely (286) y Marcelo Salas (254). Es también el máximo goleador chileno en Europa, con 198 goles en torneos oficiales.
Gigantes de Europa como el Real Madrid o el Inter de Milan pudieron disfrutar de sus goles.
“Ivan el Terrible”
Logró notoriedad en España jugando para el Sevilla, donde anotó 23 goles, que llamó la atención del coloso Real Madrid, donde se consolidó como un delantero tenaz y se ganó el cariño de la afición ‘merengue’ gracias a los 101 tantos en 173 juegos, en la temporada 1994-95, algo inolvidable para “Ivan el Terrible”, ya que le marcó 3 goles al Barcelona en un superclásico que goleó el Madrid 5-0.
Ya 1996, otro poderoso europeo hacía con los servicios del chileno, el Inter de Milan, donde conquistó el cariño de la hinchada. Junto a los 'neroazzurros' ganó la Copa UEFA en 1998 y en total marcó 40 goles.
Entrando al nuevo siglo, Zamorano se encontraba en México defendiendo los colores del América, marcó un total de 38 goles, ganando un torneo de Primera División en 2002. Un sueño de su fallecido padre era ver a su hijo con los colores de sus amores, el Colo Colo chileno.
‘Bam Bam’ cumplió el sueño de su progenitor y fue un ‘cacique’ para la temporada 2003. Con el ‘albo’ anotó 18 goles.
Dupla ‘Za-Sa’ Zamorano – Salas
“Yo creo que éramos muy similares en el juego con Ivan Zamorano. La mayor diferencia tal vez es que yo partí jugando de enganche, el antiguo 10, y creaba jugadas. Ivan era más un centro delantero. Creo que para mí era un poco más fácil acomodarme en cuanto al juego”, era la percepción de Marcelo Salas sobre su dupla con Ivan Zamorano, una delantera de lujo, que hasta ahora el chileno recuerda.
La dupla ‘Za-Sa’ era como ‘uña y mugre’ dentro de la selección chilena, ambos levantaron a ‘la Roja’ en una etapa alicaída y lo metieron nuevamente a un Mundial, con el de Francia 1998, luego de su participación en Italia 1990.
La prensa siempre especuló sobre un enfrentamiento entre ambos, por “problemas de egos”. No obstante, a la hora de entrar a la cancha, dejaban todo por su selección y son recordados hasta ahora con mucha nostalgia por la hinchada trasandina.
Zamorano posee hasta hoy en día records que no pudieron ser igualados, como ser el único jugador sudamericano en la historia en marcar cinco goles en un partido jugando por las Eliminatorias Sudamericanas de Fútbol. Además de ser elegido como el “tercer mejor cabeceador del mundo” en una encuesta de la FIFA solo superado por el argentino Martín Palermo y Miroslav Klose.
Jugó 4 Copas América con Chile, un Mundial, los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y además participó en 3 procesos clasificatorios a la Copa del Mundo, para retirarse en 2001, en un emotivo partido donde Chile venció a la selección de Francia por 2 -1.
CONMEBOL.com
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