Idolatrado por los boquenses y admirado por rivales y amantes del fútbol, la elegancia de juego, la exquisitez con el balón, la precisión en los pases y por sobre todo la excelsa pegada en los tiros libres, fueron preponderancia de su excelente carrera futbolística, que se cerraba hace dos años, decretando el fin de la magia de Román, un diez con todas las letras.
"Para mí es un día importante, en el cual he tomado la decisión de no jugar más al fútbol”, con esta lapidaria frase se despedía un 25 de enero, pero del 2015, el astro argentino, Juan Román Riquelme, de delicada pegada y sublime riqueza técnica se convirtió en leyenda del Boca Juniors y tuvo una destacada actuación en la selección Albiceleste.
“Yo tenía claro que para seguir jugando a la pelota tenía que ser algo que me interese. Me pareció lo mejor tomarlo con calma y comunicar que no voy a jugar más", fueron las textuales del ‘10’ del barrio de La Boca, en su anuncio de despedida, que fue gran protagonista de la CONMEBOL LIBERTADORES BRIDGESTONE, consiguiendo con su querido ‘Xeneize’ las ediciones del 2000, 2001 y 2007.
La dilatada carrera de Román empezó en las formativas del Argentino Jrs, pero él, siempre tuvo admiración desde pequeño por los colores 'azul y oro'. Y en una recomendación de Carlos Salvador Bilardo al presidente de Boca Juniors de ese entonces, Mauricio Macri, haría que se produzca el anhelo del pequeño Román, jugar en la Bombonera. ”La Bombonera es como el jardín de mi casa, no puedo jugar en otro lado”.
Román debutó en el año 1996, a los 18 años, sorprendiendo a los hinchas la rápida adaptación en el primer equipo. Era una época larga en la que Boca no salía de los malos resultados, que se extendieron hasta la llegada de otra leyenda del club, Carlos Bianchi.
“Riquelme es sin duda es el mejor jugador de la historia de Boca”, aseguró alguna vez Bianchi, el apodado 'Virrey' por la hinchada boquense.
A finales de 1998 llega el entrenador Bianchi a La Boca, quien se convertiría en el mentor de Riquelme, le dio la confianza y le entregó la camiseta número 10. Juntos conseguirían sacar al conjunto argentino de la sequía de títulos, logrando un campeonato y dos LIBERTADORES. En el 2000 ante el Palmeiras, siendo el “maestro de orquesta” Juan Román Riquelme. Y en el 2001 en la Bombonera ante el Cruz Azul mexicano, un plantel que es considerado uno de los mejores de la generaciones de Boca.
Un capítulo aparte es el partido que realizó el 10 de Boca en la final de Intercontinental ante el coloso Real Madrid, en donde Boca Juniors se consagraría como el mejor del Mundo con su victoria 2-1 con dos goles de Martín Palermo, un abonado de los pases de Román y justamente esa noche recibió una asistencia magistral desde casi la mitad de la cancha del 10 para el segundo tanto.
Tras ese partido, no solo Boca era resaltado a nivel mundial, el joven Juan Román se llevó todos los elogios de aquella consagración que lo catapultó al viejo continente, en el Barcelona, el otro grande del fútbol español.
Tres etapas tuvo en Boca, y en las tres con destacada actuación. Fue cedido a préstamo por el dueño de su pase, el Villarreal español, para volver en el 2007 a su casa y ganar una vez más la CONMEBOL LIBERTADORES BRIDGESTONE con el ‘Xeneize’ ante el Gremio, en una final en donde Román marcó en el encuentro de ida y vuelta dos verdaderos golazos, con los que Boca lograba su último título en esta competición.
Tras retornar a España por una temporada, Boca volvió a extrañar a su 10 e hizo los esfuerzos para que el enganche retorne a su casa, y tener su última etapa con los colores de su gran amor. Consiguió dos títulos locales y llegó en otra final de la LIBERTADORES, pero esta vez, terminó quedando en la segunda posición ante Corinthians. Tras esos partidos, Román mantenía conflictos de larga data con la dirigencia boquense, por lo que terminó alejándonse y partiendo en el club donde comenzó el sueño, el Argentinos Jrs.
Con la Albiceleste se destacó en las juveniles. Además con la absoluta llegó a jugar el Mundial de Alemania 2006 vistiendo la 10 y dejando en el banco a un joven Lionel Messi. “Riquelme es un grandísimo jugador, es un excelente nexo entre la defensa y el ataque. Me encantaría jugar con él”, reveló ‘La Pulga’ en una entrevista.
El mayor logro de Román con la selección argentina fue la consecución de la Medalla de Oro en los JJOO de Pekín 2008. En el 2009 se da su renuncia de la Albiceleste tras un conflicto con el DT de turno, Diego Maradona.
Idolatrado por los boquenses y admirado por rivales y amantes del fútbol, la elegancia de juego, la exquisitez con el balón, la precisión en los pases y por sobre todo la excelsa pegada en los tiros libres, fueron preponderancia de su excelente carrera futbolística, que se cerraba hace dos años, decretando el fin de la magia de Román, un diez con todas las letras.
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