Además de ser una leyenda porque es el único futbolista en superar la barrera de 100 partidos en Copa Libertadores con 113, Ever Almeida también dejó su nombre y apellido en la lista de arqueros que marcaron goles en el certamen.
El primero había sido el argentino Miguel Ángel Ortíz el 5 de abril de 1975, cuando atajaba para Montevideo Wanderers. Se lo convirtió en condición de visitante a Unión Huaral de Perú en la victoria por 3-2. Pero era un encuentro disputado para completar el fixture, ya que ambos estaban eliminados. Una curiosidad: ese día actuó, como compañero de Ortíz, Oscar Washington Tabárez.
Distinta circunstancia se dio el viernes 27 de abril de 1984, cuando Olimpia visitó a Estudiantes de La Plata, en el cotejo final del grupo 1. El cuadro de Asunción debía ganar por cuatro goles de diferencia para poder avanzar a la zona semifinal, desplazando a Independiente, con el que había perdido 3-2 unos días antes, y donde Almeida había sido gran figura.
Con tan solo 12 minutos disputados, Olimpia dispuso de una chance inmejorable para convertir, cuando el árbitro Carlos Montalbán de Perú sancionó un penal a su favor. La ejecución fue de Gustavo Benítez, pero el remate fue atajado por Luis Islas.
El elenco de Paraguay atacó sin cesar, pero no lograba vulnerar la defensa pincharrata. Hasta que a falta de 8 minutos, nuevamente tuvo un penal a su favor. El gran Ever Almeida tomó la responsabilidad y con categoría consiguió su gol (el único de aquella noche), que no le alcanzó al equipo para la clasificación, pero si a su leyenda, para hacerla un poco más brillante.
Eduardo Bolaños